A 98 años de la masacre
El Equipo Nacional de Pastoral Aborigen presenta revista Napa´l, edición N° 14: “Fue en Napalpí”, donde se aborda la historia de la matanza de Napalpí y el Juicio por la Verdad, en el que se buscó reconocer y dar a conocer lo ocurrido en la Masacre perpetrada por el Estado Nacional en 1924, en la que entre 300 y 500 integrantes de Comunidades Qom y Mocoví fueron asesinados por fuerzas policiales y de gendarmería bajo orden explícita del poder de turno, en la que también participaron civiles.
Los hechos ocurrieron el 19 de julio de 1924 en Napalpí, un lugar de confinamiento de Comunidades Qom y Mocoví, en estado de semiesclavitud, que eran obligadas a trabajar en condiciones misérrimas en las cosechas de algodón y en la tala de quebracho.
Según los registros históricos, y ante esta situación angustiante, un grupo de trabajadores Indígenas realizaron una protesta por las condiciones de trabajo en las cosechas y las casi nulas pagas que recibían por él. El entonces gobernador del Territorio Nacional del Chaco, Fernando Centeno, con la anuencia del presidente Marcelo T. de Alvear, ordenó reprimirla.
Unos ciento treinta policías y gendarmes, acompañados por civiles armados -algunos estancieros- llegaron hasta la reducción y durante aproximadamente una hora dispararon contra niños, ancianos y adultos desarmados que se encontraban realizando una ceremonia espiritual. Los atacantes los sorprendieron disparando a mansalva, nadie adentro se pudo defender. Lo demuestra que no hubo una sola víctima ni herido entre los atacantes. Los cuerpos fueron mutilados y enterrados en fosas comunes.
Lamentablemente, la reparación que propone el juicio, no ahondó en lo que hoy tanto necesitan las Comunidades y por lo que claman: asegurar su ámbito territorial, su espacio de vida. No se mencionó como medida reparatoria la restitución de los Territorios Indígenas despojados, tampoco se refirió al incumplimiento de la Ley 26.160 -que declara la emergencia en materia de posesión y propiedad de las tierras que tradicionalmente ocupan las Comunidades Indígenas- por parte de los gobiernos, siendo muchas Comunidades víctimas de constantes desalojos de sus propias tierras.
Gran cantidad de ellas se encuentran actualmente en lucha por la defensa de sus territorios, siendo despojadas y ninguneadas por el poder político y económico, como también por la discriminación, la invisibilización, la pérdida de la lengua y de aspectos culturales claves para su desarrollo. Encontrarnos en el aniversario de la Masacre con un juicio desarrollado y con culpables claros, es un precedente para evitar más abusos históricos contra los Pueblos preexistentes al Estado nacional y un paso para construir historias que contemplen la verdad y la justicia.
Además, en esta entrega, el Docente Intercultural Bilingüe Gustavo Javier Chimi, perteneciente al Pueblo Qom, cuenta aspectos relacionados con la Educación Intercultural Bilingüe (EIB) y su importancia para el desarrollo de los Pueblos Indígenas.
Otra sección contiene una entrevista muy personal a Ponciano Acosta, Coordinador Nacional de ENDEPA entre los años 2007 y 2014, quien acompañó a los Pueblos Indígenas en sus luchas, sus alegrías y su caminar.
Una colaboración muy especial es la de la Red Iglesias y Minerías, donde Daniela Andrade Posso, plantea aspectos sobre Pueblos y biodiversidad, una espiritualidad de reciprocidad y esperanza.
Con un mensaje escrito desde los sentimientos, ENDEPA recuerda al querido Francisco Nazar, de la mano de Ernesto Stechina.
Y el cierre se da mostrando el universo de tramas que conforman el arte Pilagá, completando así esta edición de Napa´l.
